No soy de esas personas que reseñan disquetes pero pienso que el mayor descubrimiento musical del pasado año (que coincide con el primer disco que pasa a engrosar mi estante de musicote este recién estrenado 2012) se merece unas palabras. Hace ya más de un año que descubrí Watch Listen Tell y, aunque por aquel entonces no lo sabía, aquel modesto canal sería la fuente de este tan gran descubrimiento que hoy nos ocupa, tras haberme puesto ante los ojos a grupejos como Villagers o Bombay Bicycle Club. Un día, no sé hace cuánto tiempo, volví a meterme (en el canalito, no piensen mal) y vi esto pero sin prestarle demasiada atención: era una canción más de otro grupillo majo más. Lo único que me llamó la atención fue que el chavalito aquel llamado Ben Howard era zurdo. Tiempo después volvería yo a encontrarme por YouTube buscando cosas diversas (¿o era viendo Kiss TV?) y, fuese como fuere, volvió a resonar en mis oídos la maravillosa 'Old Pine'. En el momento en el terminó la intro (que el vídeo del miraescuchacuenta no tiene) me quedé muy quieta y escuché atentamente...
Aquello era algo que había escuchado antes pero no podía acordarme de dónde. Deben saber que cuando algo de esta índole me ocurre no ceso hasta resolver la ecuación. No tardé mucho en relacionar a Ben con Bombay o Villagers y, tras algún tiempo de pesquisa, volví al vídeo original (comprobando que ya había estado allí puesto que el link andaba en moradito). Fue amor a segunda escucha (algo que, desgraciadamente, me suele pasar demasiado a menudo) pero... ¡qué amor! Las similitudes con Jack Johnson (al que idolatro) se quedan en el asunto del surf, creo yo. Ben no tiene la voz dulce y armoniosa que tiene Jack pero canta que se te derriten las orejas. Por otro lado, toca la guitarra que es un primor, de verdad, impresionante. No es Joe Satriani, eso ya lo sé (aunque a mí me gusta más, pese a todo), pero su finger-picking es algo espectacular y, sobre todo, su música es tan especial. Igual que me ocurre con Mumford & Sons, me parece que Ben es un artista con mayúsculas y que la música que compone, aunque parecida, no encuentra parangón alguno.
Considero que no se podría haber dado vida a un disquete de debutante mejor que Every Kingdom. Este jovenzuelo de Devon tiene mucho pero que mucho talento y aún nos quedan miles de canciones suyas por descubrir, amar y guardar con llave en nuestros corazoncitos, como me ha sucedido a mí con las preciosísimas 'Gracious', 'Promise' y 'Bones' (aunque el todo el disco se merece un ♥♥♥♥♥ más que redondo. Por último, quiero alabar el trabajo, el esfuerzo y el mérito que hoy en día supone crear música y escribir letras de tal sensibilidad y tal belleza y que estas consigan atravesar el alma y emocionar la mente de cientos y cientos de personas sin más instrumentos que una guitarra y, en este caso, esa voz tan única. Si me preguntasen qué es la música para mí creo que este disco conseguiría, de un modo u otro, responderla por sí solo. Uno de los mejores artistas con los que me he cruzado en muchos años y al cual espero poder ver en directo *guiño, guiño* al menos una vez porque eso tiene que ser una experiencia inolvidable. ¡Larga vida a Ben Howard, su música y su acento encantador!
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